También me reía al ver la perfecta coherencia y sincronía en los discursos de oficialistas en mi lista de seguidos: “Pacto puntofijista”, “el imperio quiere invadirnos” o “un abrazo revolucionario y socialista”.
Aprovecho para felicitar a los dirigentes peseuvistas por la exitosa campaña realizada hasta ahora. No debe ser nada fácil lograr que 7 millones de militantes repitan con cierta meticulosidad una misma lista de frases en los momentos adecuados. Bueno, casi siempre en los adecuados.
Pero como el sol no siempre brilla, gracias a las campañas desmedidas de los escuálidos adoloridos, ahora debo estar atento al chavezcandanga por si un anuncio se fuga por esta vía.
A los profesionales de la comunicación con tendencias opositoras no les bastaba ver Aló, Presidente los domingos, las cadenas de radio y televisión, las cuñas del Gobierno en los canales por cable y los cines, las Líneas de Chávez por la prensa y las apariciones radiales en el espacio De repente Chávez…
No conformes con la “poca presencia” del Presidente en medios venezolanos, estos periodistas trabajaron incansablemente hasta que un mal día Chávez dijo que también invadiría el nido del pajarito.
Es increíble el morbo que siente esta gente hacia Chávez. Es un constante juego entre gozo y rechazo irracional que nunca terminará. La Asamblea debería penalizar este tipo de conductas poco saludables, ojalá lean estas líneas y tomen nota.
He tenido que depurar mi lita de seguidos para erradicar a aquellos que se alborotaron con la presidencia del líder “mesmo” en esta red.
Lo irónico es que borré a la mayoría de los fanáticos y me he quedado con el Presidente, la raíz del asunto. Resulta que sus tweets son ponderados y no habla tanto de Bolívar o Fidel como yo esperaba.
Sorpresas que da la vida, aunque no me hago muchas ilusiones. Ya veré mi timeline principal teñido de rojo para las Parlamentarias del 26 de septiembre.
En fin, espero que los escuálidos gocen de esta nueva faceta del Mandatario. Muchos reirán, muchos llorarán. De lo que sí estoy seguro, es que el crédito de la aparición de Chávez en Twitter se lo debemos, única y exclusivamente, a la perfecta oposición que tenemos.
Como diría Cerati: “Gracias… totales”.
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